miércoles, 17 de mayo de 2017


“Mujeres que buscan Mujeres: La tendencia que revoluciono la forma de Viajar”

El gran poeta y novelista italiano Cesare Pavese escribió: "Viajar es una brutalidad. Te obliga a confiar en extraños y a perder de vista todo lo que te resulta familiar y confortable de tus amigos y tu casa. Estás todo el tiempo en desequilibrio. Nada es tuyo excepto lo más esencial: el aire, las horas de descanso, los sueños, el mar, el cielo; todas aquellas cosas que tienden hacia lo eterno o hacia lo que imaginamos como tal".

Viajar solos, en familia o con amigos. Cualquier variante es aceptable, viable y aplaudible. Conocer el mundo es un estilo de vida para varios, y un sueño a realizar para muchos. A veces, encontrar acompañante que comparta los mismos gustos, hobbies o ganas de recorrer un destino en particular resulta complicado. Pero eso ya no es un impedimento para agarrar la valija y subirse a un avión, un micro o un tren.

Las mujeres fueron las primeras en encontrar solución al problema del acompañante: viajar con desconocidas. Pero no con cualquier persona extraña. Con mujeres con las que se sientan identificadas y con las que compartan ciertos intereses. Mujeres que viajan con mujeres. Es una de las nuevas tendencias en viajes que se puso de moda alrededor del mundo, y que ya llegó a Buenos Aires hace algunos años, pero que ahora se impone con todo.

Estos viajes en comunidad se forman a través de las plataformas virtuales. las redes sociales son el espacio ideal para unir a distintas mujeres que tienen ganas de viajar, pero no quieren hacerlo con sus amigos familiares o solas. Pero también hay empresas que se encargaron de explotar este nicho.

Una de ellas es Women Away Viajes, fundada por Mariela Stimolo, una empresaria de 45 años a la que se le ocurrió la idea de la manera más curiosa, según contó en una charla con Infobae. "Hace un par de años viajé al casamiento de mi hermana en Londres, sin mi familia. La verdad es que me sentía muy culpable, dejando a mis dos hijos pequeños, pero Diego, mi marido, sabiamente me dijo: 'No los abandonas, se quedan conmigo'. Ahí me di cuenta de que yo me estaba poniendo mi propia limitación. El viaje estuvo increíble y, a la vuelta, los chicos estaban enteros, alimentados y felices. Padre e hijos habían encontrado un espacio en donde se divirtieron, fueron cómplices y lo pasaron muy bien. Y yo volví con toda la energía renovada".

Ese fue el disparador para crear una iniciativa que arrancó pensando en mamás como ella. Pero lo cierto es que en la agencia cada vez reciben más consultas de mujeres que tienen la disponibilidad económica y el tiempo para viajar, pero no tienen con quién. "A las mujeres nos resulta difícil ponernos de acuerdo para una cena, imagínate para hacer un viaje", bromea.

Y el perfil de las mujeres que eligen viajar en esa modalidad es variado, pero el denominador común es que buscan nuevas experiencias. "En general ya han viajado, están más interesadas en el conocer y en el disfrute que en las compras. Las edades también son dispares, más bien depende del destino. En viajes de destinos más "tradicionales" las edades van a partir los 40, en destinos exóticos el rango es mucho más amplio, hemos tenido chicas de 21 a mujeres de 70. Otro grupo que tenemos, es el de madres e hijas, especialmente para grandes ciudades como Londres".

Como es lógico, los viajes están pensados con la mirada femenina, más allá de un simple tour de compras. "Es salir a descubrir el mundo acá nomás o allá lejos, con mirada desprejuiciada y corazón abierto. Eso de viajar te abre la cabeza parece un cliché, pero no lo es. Más allá del destino, en todas nuestras salidas hay valor agregado. Realizamos charlas sobre temas específicos que tienen que ver con la historia y cultura del lugar, pueden ser las bodas indias, historias desconocidas de lugares cotidianos, salidas a cenar a restaurantes étnicos, arquitectura, las locaciones e historias de cine. La lista es larga".

Todas sus salidas son acompañadas desde Buenos Aires y cada pasajera recibe un kit de viaje con información útil. la cantidad de "expediciones" que realizan por año va variando según la demanda, pero en el 2017 publicaron cuatro salidas: India, Londres, Provenza y Sicilia, pero en breve lanzarán dos nuevas fechas: London Fashion Trip y Perú: Ethical Fashion, ambos junto a la escuela de Alta Costura Delego.

Siempre se trata de que los grupos sean reducidos, con un mínimo de 10 personas y un máximo de 20, para que el servicio sea personalizado, las pasajeras puedan conocerse y compartir la experiencia del viaje. La idea es que, si bien el viaje es una salida grupal, cada una pueda tener su propio tiempo y espacio. Cada mujer tiene su "pasión", por lo que están previstas tardes y noches en donde cada una pueda visitar ese museo que le interesa, irse de compras o sentarse en un café a ver la vida pasar. "Las mujeres necesitamos ese rato para nosotras, que, en un viaje, resulta fundamental", asegura Stimolo.

Y no es la única empresa que se encarga de facilitarles destinos y experiencias a las mujeres. Otro espacio también argentino para chicas que busquen hacer escapadas por el mundo con otras que compartan su sed de aventura es Mujeres Viajeras, una comunidad web creada por Pilar Tejera. Se autoproclama como un espacio dedicado a las mujeres que viajan por el mundo. Con noticias, referencias, encuentros, presentaciones, libros, premios literarios y mucho más.

Pero una de las grandes precursoras de esta manera de viajar fue Senka Radonich, de Nueva Zelanda, que arrancó en el 2005 con el proyecto Adventure Girls, creado con el objetivo de lograr que las mujeres se animen a más. Esta página ofrece excursiones de todo tipo entre mujeres, como cabalgatas, hasta experiencias acuáticas como el surf, todas diseñadas para sacar a sus usuarias de su zona de confort.

Según Stimolo, esta forma de viajar es cada vez más popular debido a las exigencias de una mujer en el siglo XXI. "Las mujeres tenemos cada vez una rutina muy intensa, por naturaleza nuestro mundo está vivido a cada segundo con la pasión de cada obligación. Trabajamos, estudiamos, somos madres, esposas y lo queremos todo y lo podemos tener porque también tenemos una mayor independencia económica. Tomar un respiro del día a día es una gran decisión, salir a descubrir lugares, sabores, olores, culturas y poder hacerlo con quienes entienden y les despierta las mismas inquietudes es entender que entre nosotras también somos una gran compañía, compartimos gustos, sentimientos, pasiones; es simplificarlo en una frase hecha, pero que describe ese momento buscado: 'cosa de mujeres'".

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