“VALLLE DE LOS CIRIOS,
EL MEJOR SANTUARIO DE CACTÁCEAS EN MÉXICO”
Al sur de Baja California, en el Desierto Central, también
conocido como Desierto de Cataviña, hay un lugar llamado el Valle de los
Cirios, un santuario de cactáceas único en el planeta que pertenece al
municipio de Ensenada. La población más cercana es Guerrero Negro, en Baja
California Sur.
Área protegida
Desde 1980, fue decretado como Área de Protección de Flora y
Fauna por tratarse de un corredor biológico donde habitan impresionantes
especies de cactáceas: cardones gigantes (Pachycereus pringlei), cirios
(Fouquieria columnaris) y torotes (Pachycormus discolor). Este valle igualmente
protege diversas especies de animales en peligro, como el borrego cimarrón y el
berrendo (una de las criaturas más veloces del planeta), además de pumas,
coyotes, búhos, águilas y más de una decena de serpientes (entre ellas, la de
cascabel).
Los seres que le dan
nombre al valle
Aquí habitan cientos de altos cirios que pueden alcanzan más
de 18 metros de alto. Crecen un metro cada 27 años y pueden vivir más de cinco
años sin agua de lluvia. En esta reserva se han encontrado ejemplares de 100
años de edad.
Gigante y longeva
El cardón es la cactácea más grande del planeta. Los que
crecen en el Valle de los Cirios han logrado alturas de hasta 15 metros, aunque
los más altos puedes encontrarlos en el Valle de los Gigantes, en San Felipe
(Baja California). Estos últimos pueden medir más de 19 metros de altura y
tener raíces con un radio de hasta 30 metros. En general, cuando cumplen 75
años, apenas les brota su primer brazo. Pueden vivir más de 300 años, aunque
hay fuentes serias que aseguran tener registros de cardones milenarios.
Cueva de Cataviña
En un túnel natural, de unos tres metros de largo, se
descubrió un mural de pinturas rupestres pintadas en tonos rojizos,
principalmente. Se calcula que estas figuras geométricas y abstractas tienen
una antigüedad aproximada de tres mil años.
Un oasis para
refrescarte
La Escuadra es el oasis de Cataviña, escondido entre rocas gigantes.
En él te espera una poza de agua fresca donde está permitido nadar.
¿Quieres más aventura?
Además de recorrer a pie este santuario, se organizan paseos
en bicicleta, campamentos para observar las constelaciones y descensos a
rappel.
Recomendaciones
Visita el Valle de los Cirios con un guía o tour operador
certificados. No dejes huella que altere el entorno y que el único recuerdo que
te lleves a casa sean tus fotos y los momentos memorables: ni las piedras ni
las cactáceas son souvenirs.
El valle en números:
25 mil km2 de superficie. Equivalente a una tercera parte del
estado de Baja California.
55 especies de mamíferos se han encontrado en el valle.
53 especies de reptiles comparten este hábitat.
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